Colonia Suiza es una aldea de inmigrantes suizos, ubicada en la localidad de Bariloche, a unos 25 km de la ciudad del mismo nombre, al pie del Cerro López. Esta pequeña villa de montaña resulta un destino turístico ideal para una escapada, donde podremos tener contacto con las costumbres y tradiciones que aún mantienen fuertemente sus pobladores, y a la vez disfrutar del hermoso paisaje que lo rodea.
Colonia Suiza se creó a fines del siglo XIX, cuando la zona fue poblada por inmigrantes oriundos del cantón Valais de Suiza, siendo así el primer asentamiento de suizos en la Patagonia. Los Goye, los Mermoud, Cretton, Jackard, Fotthoff y Neu fueron las primeras familias.
De vida sacrificada dedicada al trabajo agrario, cultivaban cerezas, ciruelas, duraznos, manzanas y peras, con los que elaboraron dulces y conservas caseras que adquirieron renombre en la región. A su vez, construían sus propias embarcaciones donde transportaban mercaderías hacia y desde el sur de Chile, por la ruta de los lagos andinos. También construyeron sus propias casas, la primera escuela y la capilla, con madera que les proveía la región.
En la actualidad los descendientes de aquellos pioneros conservan las tradiciones familiares, orientadas hacia las actividades agrícolas que son complementadas con el turismo. Así, durante una visita a Colonia Suiza podremos conocer un poco de la cultura y costumbre de su población, a través de distintas actividades, la degustación de su gastronomía, etc.
Colonia Suiza cuenta con sitios para pernocte y restaurantes que ofrecen servicios a los turistas que visitan la región. Se destaca la preparación de una comida denominada curanto, originaria del sur de Chile en la que los alimentos se cuecen en un hoyo excavado en el terreno, relleno de piedras calientes. También hay explotación de pequeños cultivos de frambuesas y frutas de climas fríos. imagen Fundocoloniasuiza