Al oeste de la provincia de Jujuy, viajando hacia el Paso de Jama en la frontera con Chile, se encuentra el pequeño poblado de Susques, emplazado en el fondo de una pequeña hoya, rodeada por mesetas salitrosas en las que se encuentran dispersos ejemplares de cardón, queñoa y colchones de tola.
Susques esta a unos 3.675 metros de altitud, y como la mayoría de los pueblos jujeños conserva la auténtica esencia puneña, con pequeñas casas de adobe con techados a dos aguas, y su tradicional iglesia declarada Monumento Histórico Nacional, construida posiblemente a fines del siglo XVI.
La Iglesia de Susques es un edificio muy pequeño y sencillo, de típicas líneas del altiplano, con sus paredes interiores decoradas con pinturas de flores y pájaros de la región. Digna de mención es la antigua imagen de la Virgen de Belén y también las campanas que fueron fundidas en Chuquisaca.
En Susques se realiza el trámite aduanero para ingresar a Chile, además es la última localidad donde los viajeros que se dirijan hacia el Paso de Jama, a unos 124 km, pueden reabastecerse de nafta a sus vehículos. En los alrededores de Susques se encuentran interesantes reservas de llamas y vicuñas, y las lagunas del Angosto de Taire, donde se pueden pescar truchas.