Entre las varias excursiones que podremos realizar en El Calafate, están las curiosas formaciones geológicas denominadas Laberinto de Piedras, también Piedra de los Sombreros o Sombreros Mejicanos, que forma parte del majestuoso paisaje del Balcón de El Calafate.
Este sitio es uno de los más curiosos de la Patagonia, donde se pueden observar rocas casi esféricas surgidas del fondo del mar que ahora se encuentran cerca de la Cordillera. Existen en muy pocos lugares del mundo y uno de ellos es El Calafate, más precisamente en las montañas que rodean la ciudad, hasta donde se llega con una excursión en vehículos 4x4.
El origen de estas geoformas se remonta al tiempo inconcebible en que la Cordillera de los Andes que todavía no se había elevado era el fondo del mar. En esas profundidades subacuáticas se generaban campos magnéticos que atraían partículas de óxido de hierro. Esas partículas se agrupaban formando esferas moldeadas por las corrientes de agua.
A su vez, las esferas eran tapadas por sucesivas capas de sedimento y, si nada inesperado hubiese ocurrido allí, hubieran permanecido aprisionadas dentro de otra roca hasta la eternidad. Pero cuando la placa de Nazca se acercó en cámara lenta por debajo del Pacífico y chocó con el continente americano, el fondo del mar se levantó y la cordillera surgió de las aguas.
Entonces los sedimentos submarinos pasaron a ser las rocosas laderas de las montañas que, a lo largo de millones de años, fueron erosionadas por la lluvia y el viento. Así comenzaron a quedar al descubierto las extrañas rocas ferrosas y circulares, que al ser de metal no sufrieron la erosión. Y ahora se las ve a simple vista, con media esfera saliendo de una roca más grande, rodeadas por un círculo que les da una forma de sombrero mexicano. Imagen ramonbaile