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Vacaciones en el litoral: Isla del Cerrito

Entre los ríos Paraná y Paraguay, en pleno Litoral argentino, la Isla del Cerrito es ideal para unas vacaciones de aventura. Se trata de una reserva natural que está rodeada por otras cuatro islas: La Guáscara, Carpinchito, Brasilera y Mvorebí. Uno  de los principales destinos de pesca del Chaco.


Para los viajeros que buscan alternativas de camping, salidas de aventura y la práctica de actividades en plena naturaleza, Isla del Cerrito situada en el extremo este de la provincia de Chaco es un destino que se distingue por la tranquilidad reinante y la abundante flora y fauna que conserva.

Ubicada estratégicamente frente a la correntina Paso de la Patria, y a poco menos de una hora de viaje desde la ciudad Capital de Resistencia, la isla se constituye como uno de los mejores pesqueros del Litoral, en la confluencia de los ríos Paraná y Paraguay.

También conocida como Isla del Sol, el destino lleva la denominación de Cerrito por la pequeña elevación que ofrece el terreno, en cuya cumbre fue erigida una capilla rodeada por especies propias de la selva de ribera, entre palmeras pindó, guayabas y naranjos. La Capilla Virgen del Pilar, construida entre 1928 y 1939, lleva un estilo colonial y en la cúpula aún conserva pequeños azulejos en color blanco y morado. Lindero al templo religioso, existe también un mirador ideal para la observación de amaneceres y coloridas puestas de sol.


Destino de naturaleza

La Isla del Cerrito es una reserva natural que está rodeada por otras cuatro islas: La Guáscara, Carpinchito, Brasilera y Mvorebí. En el conjunto, se distingue por su perfil alto y rocoso. Un destino turístico ideal para el descanso y el relax, con una completa infraestructura de servicios al viajero con hosterías, campings, albergues, restaurantes y proveedurías.

El paseo incluye aventuras en plena naturaleza como safaris fotográficos, caminatas a través de selvas en galerías, playas soleadas, el avistaje de numerosas especies de aves multicolores, cabalgatas, paseos en lancha y deportes náuticos.

La reserva natural de la Isla Cerrito se extiende en la zona más baja y está constituida por cañadas y esteros, con la presencia de grandes ejemplares de laurel, timbó, aliso, sauce, lapacho, ingá, ceibo, guayaibí, palo lanza y, sobre todo, palmeras.

En cuanto a la fauna, destaca el mono carayá, también conocido como “aullador”, al que su suman otras especies menos amigables como las víboras constrictoras. También en los humedales, lagunas, bañados y camalotales, se avistan carpinchos, zorros aguará, yacarés, garzas y biguáes.

Paseos y excursiones


  • Una de las visitas imperdibles es el Museo de la Isla, que es de carácter histórico, donde se exhiben piezas y elementos utilizados durante la Guerra de la Triple Alianza. Hay restos de sables, bayonetas, espadas, uniformes, monedas y balas pertenecientes a los diferentes ejércitos. El sitio permanece abierto todos los días de 9 a 12 y de 15 a 19 horas.
  • Otra de las excursiones recomendadas por los lugareños es a la Laguna Porá, ubicada dentro de la misma isla.
  • Y para los amantes del pique se organizan en la isla importantes torneos de pesca, provinciales, nacionales e internacionales.
  • La temporada de dorados, el pez conocido como “tigre de los ríos”, se extiende de julio a noviembre, cuya modalidad de pesca es con devolución por ser considerado un “pez de interés nacional”. Desde la costa o embarcados, se pescan también otras especies como amarillos, moncholos, bogas y surubíes.


Datos históricos

La Isla del Cerrito se encuentra dentro del Departamento Bermejo y fue en tiempos pasados cabecera de las autoridades del Territorio Nacional del Gran Chaco. Poblada por aborígenes, la historia local asevera que el primer hombre blanco en avistarla fue Sebastián Gaboto, quien desembarcó en ella en 1528.

Elegida como uno de los escenarios más importantes que tuvo la Guerra de la Triple Alianza -que enfrentó a la Argentina, Brasil y Uruguay contra Paraguay, entre 1865 y 1870- la isla fue ocupada por el Imperio del Brasil. Pocos años más tarde, la Argentina reclamó su soberanía y la logró a través de un tratado de límites.

En 1914, toda la isla fue convertida en Reserva Nacional y diez años más tarde el entonces presidente Marcelo Torcuato de Alvear dispuso la creación de una Colonia Regional de Leprosos, que atendió a más de 200 enfermos de las provincias de Formosa, Corrientes y Chaco. La Colonia Regional junto al Hospital de la isla fueron considerados el primer centro modelo en el país para el tratamiento del Mal de Hansen que duró hasta la década del '60, cuando el destino chaqueño comenzó a posicionarse como uno de los centros turísticos provinciales más visitados.

Datos útiles

- Para la estadía se recomienda llevar repelente de insectos.
- La ruta de acceso es de ripio y requiere cierto cuidado al manejo.
- En el camping municipal hay capacidad para 4 mil carpas y permanece abierto todo el año con servicios de luz eléctrica, fogones, sanitarios, restaurante, parrillas, piscinas, balneario propio, canchas para deportes y estacionamiento.
- Las tarifas de hospedajes en la Isla son muy económicas desde U$S 10.
- En Resistencia, hay hoteles desde U$S 70 por noche.
- Una salida de pesca cuesta alrededor de U$S 200 por persona en una lancha con guía incluido, si son cuatro el precio baja.

Cómo llegar

Desde la ciudad Capital de Resistencia la distancia es de 54 kilómetros, de los cuales 18 son asfaltados y 36 mejorados con ripio. El único punto de acceso vial es el Puente San Pedrito, que atraviesa el riacho Ancho, en el extremo sudoeste de la isla. Allí, confluyen las Rutas Provinciales 39 y 63 —ambas de tierra— que vinculan la Isla con Margarita Belén y Barranqueras, respectivamente.

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