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La Cumbre, de tradición turística


Su hay un lugar en la provincia de Córdoba, donde hace bastante tiempo se vive el turismo en todo su sentido, ese es La Cumbre. Un destino turístico maravilloso para disfrutar tanto en vacaciones de verano, como así también haciendo una escapada de fin de semana, junto a la familia, con amigos, o un viaje en pareja.

Ubicada a unos 94 km de la ciudad de Córdoba capital, podremos encontrar  a la localidad cordobesa de La Cumbre, en el Valle de Punilla, esta protegida por una ladera de las Sierras Chicas, a 1.141 metros sobre el nivel del mar.

Allí, este lugar turístico de Argentina, recibe a los viajeros con el verdor de su valle y un clima seco, de montaña, ideal para el turismo en todas las estaciones del año.

Con sus características propias, con casonas de estilo ingles que nos demuestran la influencia de los británicos durante la creación de los ferrocarriles, museos, artesanos, un campo de golf privilegiado que posee mayor cantidad de desniveles por su característica serrana, son algunas de las particularidades que posee La Cumbre.

Una ciudad ubicada en el corazón del valle de Punilla, donde las montañas son protagonistas exclusivas del paisaje. Su pequeño centro guarda un señorial y pintoresco estilo que conjuga pequeñas calles pobladas de restaurantes y bares con mansiones y grandes chalets de principios de siglo.


Datos históricos de La Cumbre como destino turístico


En su historia; La Cumbre nació con el ferrocarril, cuando todavía estaba en poder de los ingleses, situación que revirtió el presidente Juan Domingo Perón al nacionalizarlo durante su primer gobierno.

En 1892, los británicos crearon el ramal que unió a Cosquín con Cruz del Eje. Luego, cuando corría 1896, el británico Robert Runciman loteó la estancia San Jerónimo, con la división de los terrenos, los ingleses se fueron estableciendo allí, dando origen al casco céntrico de La Cumbre.

En 1926 abrió sus puertas el Golf Club, al cual asistían empleados del ferrocarril, británicos en su mayoría. Con el paso del tiempo fue ganando celebridad y reputación por su cancha de golf de 18 hoyos. Así se fueron sumando adeptos de alcurnia no sólo porteña, también concurrían aristócratas de Rosario y de Córdoba, que no tardaron en construir allí sus mansiones de veraneo, siguiendo el estilo victoriano que la comunidad británica había impuesto. Aún hoy la zona conserva ese estilo en la arquitectura de sus casonas.
Allí también vivió Mujica Láinez en la zona residencial de Cruz Chica desde 1964 hasta su muerte, en 1984.

Siguiendo el ejemplo de Láinez, muchos otros intelectuales y artistas eligieron pasar largas temporadas en La Cumbre, por lo que es posible encontrarse en cualquier callecita o en el más conocido de sus pub's nocturnos, El Pungo, con el músico Fito Páez y otros reconocidos integrantes del espectáculo. También recorrió sus calles el pintor Remo Bianchedi y la escritora Vlady Kociancich, entre otros destacados de la cultura.


Sede de eventos deportivos y artísticos, La Cumbre es frecuentada por artistas de diversas ramas del arte, como pintores y escultores, que han realizado muchas de sus obras bajo el sol de estas mágicas sierras.

En diciembre se lleva a cabo Las Noches de las Galerías (Gallery Nights), un circuito artístico que incluye la nueva galería de arte del pintor Miguel Ocampo, la casa museo del escritor Manuel Mujica Láinez, que es una inmensa casona de estilo español que se asoma entre añosos árboles y la legendaria estación de trenes que hoy aloja a la Sede de la Secretaría de Turismo.

Excursiones por las sierras, hoteles de categoría, amplias vistas panorámicas, cabalgatas, aventuras, son sólo algunas de las opciones que La Cumbre ofrece al turista.

Esta ciudad realmente atrapa a los visitantes con su encanto, la belleza del paisaje y la tranquilidad de su entorno, que la convierten en un lugar turístico ideal para descansar, relajarse y disfrutar de la tranquilidad y actividades turísticas.

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