Tal parece que el enoturismo esta teniendo un gran crecimiento en nuestro país. Los turistas que llegan a Argentina para visitar los llamados "Caminos del vino" sumaban este año 1.100.000, un 118% más que en 2006, según el II Informe Nacional de Turismo Vitivinícola presentado este martes por Bodegas de Argentina. El documento señala que el 84% de los turistas que visitan las bodegas son menores de 55 años y el 54% son mujeres, mientras que la visita de extranjeros se incrementó un 11%. Para Bodegas de Argentina, estos números reflejan el posicionamiento en el mundo que tiene esta actividad, una cifra considerablemente mayor que el crecimiento del total de visitantes al país en 2007, que fue del 21%. Durante el año pasado, los turistas que visitaron las bodegas mendocinas representaron el 74% del total de visitas a bodegas del país. El anuncio fue realizado en la bodega Navarro Correas, en el departamento mendocino de Godoy Cruz, donde la responsable de la Comisión Nacional de Turismo Vitivinícola, María Belén Gaua, anunció que Mendoza "se reposicionó en el enoturismo el año pasado". "Si bien esta provincia siempre ha sido líder en cuanto al enoturismo, es de destacar el considerable crecimiento de visitas a bodegas de un año a otro", expresó Gaua. Bodegas de Argentina señaló que la provincia de Mendoza "mantiene el liderazgo en cantidad de enoturistas; San Juan ha mantenido la afluencia y Salta ha aumentado considerablemente los indicadores". El informe agrega que el 70% de las visitas, una vez que finalizan el recorrido, compran vinos en las bodegas; el 52% de las bodegas ofrece material de promoción en sus salas de ventas, y del total de bodegas que conforman los caminos del vino, 120 pertenecen a capitales argentinos. Vía: Telam
Los ponchos están relacionados con las prendas del gaucho de antaño, y que hoy seguimos manteniendo como prenda tradicional en los pueblos rurales, como abrigo de campo y también por quienes amamos las costumbres campestres. También se puede observar el uso de esta prenda criolla en conjuntos de la música folclórica, en cantantes y sus integrantes músicos. El poncho es un abrigo de diseño sencillo, consistente en un trozo rectangular de tela pesada y gruesa, en cuyo centro se ha practicado un agujero para introducir la cabeza. La tela se deja caer sobre el cuerpo, disponiendo los extremos de manera que permite mover con facilidad los brazos. En Argentina se utilizan también los ponchos de diseño de guarda atada, imprescindibles en lo que se refiere a diseño y cultura tradicional. Estos se realizan con guardas pampa o mapuche e inca, estos últimos recreados en la ciudad de Belén, en la provincia de Catamarca. Cada provincia tiene un modelo particular de poncho, por ejemplo, al pon